Nuestro reto es la búsqueda de los vinos perfectos.
El trabajo artesanal parte de los mejores viñedos, en los que practicamos una viticultura racional y respetuosa con el medio ambiente durante todo su ciclo vegetativo.
Consideramos que la tradición no tiene porqué estar reñida con la innovación, sino ir de la mano con el fin de mejorar.
El mimo, la perfección y el cariño en lo que hacemos se palpa desde el mismo transporte de los racimos, para lo cual utilizamos pequeñas cajas de plástico en los viñedos más viejos y pequeños remolques para los viñedos jóvenes.
Además de la selección en la viña, TODOS los vinos de Luis Cañas son sometidos a un doble control de selección. Primero en una mesa se seleccionan manualmente los racimos y posteriormente, cada uno de los granos a través de una mesa Mistral, de modo que sólo las bayas que se encuentran en perfecto estado siguen el proceso.
La elaboración más exigente. Seleccionamos las barricas de roble francés y americano, eligiendo las mejores tonelerías del mundo. Barricas que renovamos de manera continua, y cuya edad media es de tres años. Todo un lujo.
Comprometidos con la calidad y la sociedad.
En el año 2006 pusimos en marcha un proyecto pionero en España: la construcción de una Residencia para los trabajadores del campo.
Con una capacidad para 40 personas dispone de dormitorios separados para hombres y mujeres, servicios, además de lavandería, cocina industrial, comedores, salón de ocio y enfermería. La iniciativa recibió el prestigioso Premio a la Empresa Solidaria 2008 otorgada por la revista Dato Económico.
Comprometidos siempre con el medio ambiente y la calidad, fuimos la primera bodega en España en conseguir el Protocolo BRC con AENOR, la ISO 14.000, el certificado de calidad ISO 9.002, e inauguramos una Estación propia Depuradora de Aguas Residuales.